Cuando una empresa decide participar en una licitación pública en Chile, normalmente el primer contacto formal con el proceso ocurre al revisar el documento de licitación. Dentro de ese paquete informativo, uno de los archivos más determinantes, y a veces menos comprendidos, son las bases técnicas de una licitación.
Entender qué son las bases técnicas y cómo interpretarlas te ayudará a no participar “a ciegas”, sino competir con una oferta sólida, que cumpla los requerimientos, alineada con la normativa vigente de licitaciones y las reglas del sistema de compras públicas en Chile.
Las bases técnicas son un documento fundamental dentro del proceso de adquisición del Estado.
Su rol principal es describir con precisión qué requiere la entidad pública, justificando la necesidad y definiendo parámetros específicos del producto o servicio a contratar.
En otras palabras, este documento define necesidades, guía la oferta y asegura transparencia en la participación de los proveedores.
A través de sus secciones, permite comprender requerimientos técnicos y condiciones, criterios mínimos de cumplimiento, formas de entrega, calidad esperada y todas las características que influirán en la evaluación posterior.
Incluso dentro del marco general de la ley de compras públicas, las bases técnicas actúan como un documento que regula de forma detallada lo que se espera del proveedor y cómo se medirá su desempeño.
En un contexto donde, según ChileCompra, en 2024 se transaron alrededor de US$ 17.643 millones en Mercado Público y cerca del 79% de esos montos se ejecutaron mediante procedimientos competitivos abiertos, unas buenas bases técnicas resultan clave para que proveedores y organismos puedan participar y adjudicar de forma transparente y eficiente. (Fuente)
La función de las bases técnicas es ordenar la información indispensable para el proveedor, garantizando que todas las ofertas se presenten bajo criterios homogéneos.
Gracias a ello se logra:
El contenido de las bases técnicas suele incluir:
Por regla general, el área requirente elabora las bases técnicas, porque es la unidad que mejor conoce la necesidad interna, el contexto operativo y los estándares que debe cumplir el bien o servicio.
Esta área suele trabajar en coordinación con la unidad de compras y, en ciertos casos, con el área jurídica para asegurar alineamiento con la ley de compras públicas y la normativa específica del organismo público comprador.
Su importancia radica en que definen necesidades de manera clara y verificable, lo que reduce controversias durante la evaluación de propuestas y la ejecución del contrato.
Cuando las bases técnicas están bien formuladas, se favorece la objetividad de la selección y se disminuye el riesgo de reclamos, atrasos o incumplimientos en el proceso de adquisición.
Para los proveedores del Estado, comprender la función de las bases técnicas es clave porque la propuesta del proveedor debe quedar alineada a bases en cada punto: descripción técnica, metodología, plazos, garantías, documentación de respaldo y precios.
Una lectura superficial aumenta la probabilidad de incumplimiento de requisitos formales o técnicos, lo que puede dejar fuera de competencia incluso a una oferta competitiva en precio.
Además, las bases técnicas permiten al proveedor analizar si realmente puede cumplir con los compromisos exigidos, tanto en calidad del bien/servicio como en tiempos de entrega y condiciones de soporte.
Muchos rechazos de ofertas ocurren por no interpretar correctamente detalles técnicos o condiciones administrativas.
En el marco de la ley de compras públicas, las adquisiciones pueden realizarse mediante licitación pública, licitación privada, trato directo u otras modalidades como Convenio Marco, según montos y naturaleza del proceso de compra pública.
En la licitación pública en Chile, como regla general de compras, existe participación abierta a cualquier proveedor hábil que cumpla las exigencias de las bases y de la normativa vigente de licitaciones.
Independientemente de los tipos de licitación, las bases técnicas cumplen la misma lógica: describen el objeto de la contratación, fijan criterios de cumplimiento y orientan la evaluación de ofertas.
En modalidades simplificadas o Bases Tipo, se tiende a estandarizar aún más estos contenidos para agilizar las compras del Estado y reducir carga administrativa para la entidad pública.
Para interpretar adecuadamente un documento de licitación y sus bases técnicas, el primer paso es descargar y leer en detalle todas las secciones desde el portal de licitaciones de la plataforma electrónica Mercado Público.
Es importante revisar tanto bases administrativas como técnicas, anexos, formularios y el calendario con las etapas del proceso, plazos y los criterios de evaluación.
Luego, se recomienda identificar los requerimientos técnicos obligatorios, las condiciones de entrega, las garantías exigidas y la documentación imprescindible para no quedar fuera por incumplimiento de requisitos.
Si existen dudas, la normativa promueve transparencia permitiendo consultas a través del foro de preguntas del sistema de compras, herramienta que muchos proveedores aún desaprovechan.
Por último, prepara tu propuesta, alineada con las bases, y súbela a la plataforma. asegurándote de cumplir con los plazos y los requisitos.
Comprender y analizar correctamente las bases técnicas es esencial para cualquier proveedor que quiera competir con seriedad en el sistema de compras del Estado.
Estas bases permiten garantizar un proceso justo, estructurado y transparente, donde cada empresa puede presentar su propuesta bajo reglas claras.
Cuando logras dominar su interpretación, mejoras tu estrategia, evitas errores y fortaleces tus probabilidades de adjudicación.
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